fbpx

Es misterioso, está de moda, y parece que todos lo quieren. Puede causar consternación para baristas, que en realidad no saben cómo hacerlo. ¿Qué es un Flat White?

A medida que el Flat White se vuelve cada vez más popular, más y más cafeterías están comenzando a servirlo – pero no sin arriesgarse a causar controversia. Esta bebida, a menudo descrita como un latte pequeño, ofrece un sabor más intenso y viene sin la gruesa capa de espuma que trae un cappuccino. Pero ¿se hace con uno o dos shots de espresso? ¿Se sirve en una taza de vidrio o de cerámica? ¿Cuál es el tamaño ideal? Y la pregunta más importante, ¿de dónde viene?

Orígen

Los orígenes de esta bebida son motivo de debate entre los aficionados al café. Estamos seguros que viene del otro lado del mundo – pero, ¿dónde exactamente? Los Australianos aseguran que el Flat White es algo 100% australiano, mientras que en Nueva Zelanda, insisten que es un invento Kiwi. Y si tienes el valor de preguntarle a un barista nativo de cualquiera de estos lugares, prepárate para una intensa discusión; ninguno de los dos países está dispuesto a ceder en este asunto, que pareciera ser de importancia nacional.

Flat White, cappuccino o latte

A primera vista, pudieras dudar sobre la diferencia entre un Flat White, un cappuccino y un latte. Las tres son bebidas a base de espresso, con leche y una capa de micro-espuma.

Un latte, sin embargo, suele ser servido en una taza más grande que contiene alrededor de 8 oz, mientras que el tamaño ideal para un cappuccino y un Flat White es una taza de cerámica con 6 oz o un poco menos.

Hablando de espresso, el cappuccino y el latte pueden ser preparados con uno o dos shots, mientras que el Flat White tradicionalmente se sirve con dos. Algunos australianos optan por un solo shot. Y hay algunos baristas que aseguran que tiene que ser un ristretto doble, ofreciendo así un sabor más concentrado que un espresso.

Asi que para resumir, esta bebida es usualmente más pequeño que un latte, y preparado con dos shots de espresso o ristretto, lo cual lo hace una bebida bastante concentrada. Es una alternativa directa, con sabor fuerte a café. Es por esto que se prepara con una pequeña cantidad de leche y solo la capa más delgada de microespuma, en contraste con el cappuccino. Así que parece ser que la leyenda del Flat White no es un misterio tan grande después de todo.

Con la creciente demanda por bebidas con menos leche y el aumentado interés por el sabor del espresso, el Flat White es la opción perfecta.

Pero seamos honestos, la diferencia entre un latte, un cappuccino, y un Flat White es mínima, y muchos lugares te servirán un cappuccino o un latte en su lugar. Esencialmente, estas bebidas son sólo “espresso, leche, y espuma”.